LA COTORRITA DE LA SUERTE. Llevaba una pianola. Era una caja de 60 por 60 centímetros con una manija que al girarla tocaba tangos populares. Se paraba en las puertas de las casas y los habitantes salían a comprar, por 10 centavos, unos papelitos que sacaba una cotorrita que tenían escritos el destino o el número de la suerte.
EL MANISERO llevaba un tacho con una chimenea con fuego siempre echando humo para llamar la atención. Tocaba una corneta de bronce con forma de cuerno. Vendía los maníes en la Estación Buenos Aires al Pacífico.
Texto: Santiago, Uriel y Sergio - 3º B
No hay comentarios:
Publicar un comentario